01 Nov 2018
Comprar una vivienda
¿Querés tener una casa propia? Si tu respuesta es SÍ, compartís ese sueño con muchas personas. El gran desafío es cómo pagarla.
En la sección ¿Con ahorros o con deudas? vimos distintas formas de planear el pago de las compras importantes. La más adecuada para vos depende de los ahorros que tenés, la urgencia de la compra o la posibilidad de conseguir financiación.
● ¿Con ahorros? Ahorrar lo suficiente para comprar la casa al contado puede ser muy complicado. Sería necesario conseguir ingresos elevados durante mucho tiempo, gastar poco y colocar el dinero ahorrado en productos financieros que brinden una buena rentabilidad. No es fácil, pero tampoco imposible.
● ¿Con deudas? La forma más habitual de conseguir una vivienda propia es pedir un préstamo hipotecario, en el que la misma casa comprada sirve como garantía: si dejás de pagar las cuotas, el banco puede llegar a quedarse con el inmueble y venderlo para recuperar el dinero que te prestó.
Debido a la solidez de la garantía que recibe el banco, los intereses de los préstamos hipotecarios son menores que en otro tipo de financiación.
Por otra parte, no todos los bancos financian el 100% del valor de la casa. En tal caso necesitás juntar al menos la parte que no te van a financiar. Consultá los requisitos exigidos y las condiciones de los bancos para el otorgamiento de préstamos hipotecarios.
¿Comprar o alquilar?
Tener un techo propio es un deseo muy humano, pero implica un importante esfuerzo económico.
Financieramente, comprar es una buena opción cuando pensás permanecer en la misma vivienda durante mucho tiempo: al final del periodo, la casa será tuya. Pero si pensás mudarte en pocos años, tal vez resulte más conveniente el alquiler.
También hay que considerar las condiciones económicas de cada momento; por ejemplo, si las cuotas de los préstamos hipotecarios son superiores, inferiores o similares a los precios de los alquileres.